Desde aquí os vamos a dar algunos consejos para que podáis dar el mejor cuidado a  vuestros guantes de portero, alargando principalmente la vida del látex tal como apuntamos anteriormente. 

PASO 1 – USO / CUIDADO

Ante todo y primeramente tal como exponíamos en nuestro post sobre los diferentes tipos de cortes de guantes de portero, es importante adquirir el tipo de guante que mejor se adapte a nuestras necesidades, frecuencia de uso, terreno de juego, etc… Considerando la regla básica de que cuanto mayor es el nivel/porcentaje de látex puro de la palma el agarre será mayor, pero nos encontraremos consecuentemente con una menor durabilidad y viceversa.

Una vez tengamos en cuenta esta dinámica de agarre / resistencia, es importante adquirir una buena técnica para que así nuestra herramienta de trabajo, los guantes de portero, sufran los menos posible.

En este campo ayudan mucho los pequeños detalles, no solo a la hora de blocar el balón, sino también a la hora de levantarse tras ir al suelo. Aunque parezca un pequeño detalle, levantarse del suelo ayudándonos con el puño del guante como apoyo en lugar de la palma, ayudará a reducir considerablemente el desgaste de la misma, sobre todo si jugamos en un terreno sintético agresivo.

PASO 2 – CONSERVACIÓN / MANTENIMIENTO

Tras el uso de los guantes de portero en cada entrenamiento o partido, es importante y muy necesario sacar los mismos de nuestra mochila o bolsa de deportes, dejándolos secar libres a temperatura ambiente. Ya que por el contrario al dejarlos en un espacio cerrado y sin ventilación tras usarlos, conseguiremos que la humedad acabe deteriorando la palma del guante, llegando a esa sensación de acartonamiento.

No es estrictamente necesario lavar el guante después de cada uso, ya que el continuo mojado de los mismos también acabaría por adelantar su deterioro, pero sí que puedan “respirar” a temperatura ambiente diariamente como decimos.

PASO 3 – LIMPIEZA DE TUS GUANTES DE PORTERO

En el caso de ser necesario el lavado de los mismos tras varios usos,  debemos lavar los guantes con agua tibia (máximo 30º ), para eliminar la suciedad, haciendo especial hincapié en la zona de la palma. Todo ello utilizando un jabón neutro o específico para guantes de portero, evitando detergentes o disolventes. El proceso se completaría empapando completamente el guante y dejando el mismo a remojo durante unos 15 minutos aproximadamente para después aclararlos. En guantes con protecciones se recomienda quitar las mismas antes del proceso de lavado, si la tipología del guante lo permite.

Tras el lavado dejar el guante secar a temperatura ambiente, preferentemente colgado y en un lugar fresco, seco y ventilado, sin exponer a ningún a luz fluorescente, ni fuentes de calor como estufas, radiadores, ni tampoco al sol, para evitar así que se sequen o acartonen y pierdan sus propiedades naturales de adherencia.

Como pequeño truco podemos rellenar los guantes con papel, para así reducir el tiempo de secado. Así tendríamos nuestros guantes listos para el siguiente partido.

Es importante anotar que es imprescindible lavar los guantes de portero antes de su PRIMER USO.

La razón es simple, cuando se fabrican los guantes para preservar sus cualidades (ya que pueden estar en un almacén meses antes de que lleguen a tus manos) se añade químicos al látex para preservarlos. Estos productos químicos, si no se eliminan, hacen que tus guantes tengan un polvo en su palma que puede reducir enormemente el agarre que ofrecen. La única manera de eliminar estos químicos es pre lavando los guantes de portero antes de su primer uso.

Desde HO SOCCER queremos que nuestros clientes estén satisfechos con nuestros guantes de portero y esperamos seguir ofreciendo guantes de portero de primera calidad que sean resistentes y duraderos para que cada portero tenga una herramienta con la cual vencer a sus competidores.